Mi querid@ michian@, si te sientes estancad@ o no avanzas en lo que deseas, esta oración es para ti. ¡Bendiciones infinitas!!!!
Esta oración se hace con una vela azul sobre un platito blanco; para ello, deberemos estar bañados y el lugar donde la vamos a colocar, limpio.
¡Oh glorioso San Miguel! Arcángel predilecto del Señor,
uno de los siete grandes príncipes que asisten al Trono Supremo,
grande en la sabiduría, grande en el poder contra los demonios,
y más grande aún en el ardor de la caridad y la piedad hacia nosotros;
excelso ministro del Altísimo que, con ardor y lealtad,
impartes la Justicia Divina a todos los seres vivos.
Hoy, con devoción te alabo por la veneración y honor
que te rinden todas las jerarquías angélicas
de las cuales eres augusto príncipe,
y puesto que eres el caballero de la Inmaculada Virgen María
y dignísimo portador de su estandarte,
hazle llegar mi cariño y ruégale me guarde bajo su manto protector.
Guerrero justo y fiel que valientemente luchaste
contra el soberbio príncipe de las tinieblas
y venciste, desterrándolos al infierno para siempre:
alentado por tan excelente acto te confiamos nuestras batallas,
sé nuestro augusto defensor ante el enemigo,
ayúdanos a salir victorioso de los ataques,
con tu espada y escudo detén los ataques del mal.
Aleja San Miguel Arcángel todo aquello que nos pueda perjudicar,
de mí y de mis seres queridos,
limpia, purifica, allana y abre nuestros caminos
para que, libres de todo impedimento y con tu inestimable auxilio,
podamos avanzar, prosperar y sabiamente lograr nuestras metas,
y así obtener todo lo que ansiamos y deseamos para nuestro bien,
muy especialmente solicitamos tu ayuda para obtener:
(pide tu solicitud)
San Miguel, tú que administras la piedad de Dios,
y estás dotado del amor compasivo hacia todos nosotros,
tú, que vienes desde el cielo para ser nuestra guarda, guía y compañero,
por favor ciñe tu armadura a nuestro cuerpo y a nuestra alma
para que nada oscuro ni dañino la pueda traspasar,
y nos ampare y preserve en todo momento y situación.
San Miguel, soberano ángel protector,
extiende tus benéficas alas sobre nosotros,
acude con el ejército de tus Santos Ángeles,
y aparta de nosotros todo obstáculo que se oponga
a la realización de los ardorosos anhelos de nuestra alma.
Con tu dulzura y entrega auxílianos,
con tu fuerza guárdanos, defíendenos, protégenos,
y haz que sepamos imitar tus virtudes
¿Quién como Dios? ¡Nadie como Dios! (repítelo 19 veces, respirando y exhalando cada vez)
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Reza 3 credos, 1 padrenuestro, 1 avemaría y una gloria.